lenguaje figurado y tus mentiras
y misterios, que te excusan de la mierda.
Me dejaste aquí muy sola,
te marchaste muy muy lejos,
no hubo nunca una llamada,o señal que me dijera
que importaba algo en tu vida,que importé en algún momento.
Que aquel año no había sido...una pérdida de...
- ¿Tiempo?¿Por qué nunca comprendiste?
¿Por qué siempre sonreías?
No podías compartir tus impresionescon la tonta de María, ¿para qué?
Eras un traidor meditabundo.Un terrible maniobrero
y te buscaste una razón,no sé qué trabajo en Viena,
para huir de reprimendasal partirme el corazón.
- No,no busqué trabajo en Viena...
sigues siendo el mismo ruin,
que me ignora y me desquicia
con su frase tonta y suelta,de repente, que no aporta,
nada lógico o coherentea mis monólogos tediosos.
Porque siempre eran los mismos.Y dirás que no te acuerdas.
Que eras otro. Muy distinto.Pero no me engañarás
con tu indolencia.Pues yo sé lo que viví,
y que aprendíde todo aquello.
Y que ahoraa día de hoy,
ya me ves,que me ves,
otra soy.¡Otra soy!
(...)¡Maldita sea, ¿por qué te fuiste?!
- No me fui.
- No bromeo. Siempre,
Alberto Cancio García
Fotografía: Google
Fotografía: Google
HOSTIA!!! ¿Cómo coño se te ha ocurrido esa idea? Es brutal, my friend... Ya te vale, dejarnos en ridículo al resto... >.<
ResponderEliminar¿En ridículo? ¡Bah! Es una tonteriílla bastante pobre. Ni siquiera he plasmado lo que quería en un principio. Y para colmo esta noche he soñado con una María de la que sólo tomé el nombre porque rimaba con "sonreías".
ResponderEliminarEs un texto abrupto, pero bueno, si a ti te gusta, yo considero no haber perdido el tiempo [la vida] con él :)
PD: Publica algo ya. Que este Blog parece llamarse "Paranoia Albertónica".
Siempre descolgando palabras... yo tb soy una maría de esas que matan comiendo.
ResponderEliminar"No te digo na y te lo digo to."
puff... me encanta
ResponderEliminarVaya, qué buena acogida tienen las cosas que hago en cinco minutos, ¡jajajaja! No es por menospreciar gustos ni mucho menos, pero la cosa me sorprende :)
ResponderEliminarGracias, Mar y Amelie Poulain.
Yo no sé ni que comentarte, anonadada me hallo.
ResponderEliminarPasamado me has. Me gusta que escribas cosas en cinco minutos, si salen así.
ResponderEliminar¡Anda ya! Apufff, no sé qué le véis. Es sólo una tópica circunstancia humana. Ortega la machacaría, y Neruda cambiaría de opinión y se pondría de su parte... Nada más humano, nada menos artístico... :S
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