Se manchan los papeles sin decir
la música que suena en mis entrañas.
Parece todo un sueño:
irreal como un boceto, imaginario
como una fantasía de nostalgia,
transparente como el cristal que ahora
del mundo y los sentidos me separa.
Podría lanzar gritos
de dolor, pero no me duele nada.
Tengo una enfermedad tan incurable
que ni la tinta puede ya
nombrarla.
¡Maldita seas, poesía,
si en una noche triste, como tantas,
me miras desde lejos
y guardas tras el humo tu mirada!
Jorge Andreu
10 de noviembre de 2010
Con estos versos firmo el final
de mi primer cuaderno Paperblanks,
herido como Mozart.
Me gusta! =D
ResponderEliminar:) Gracias. Me ayuda mucho ese comentario esta mañana. Besito.
ResponderEliminarMe gusta bastante el segundo párrafo. Tiene buen ritmo (aunque claro... Yo hablando de ritmo no debo ser muy fiable ajajaj).
ResponderEliminarPues nada, a comprar otro Paperblanks nuevo :)
La próxima paperblanks que compre llevará la firma de Chopin, como a ti te gusta, jaja. Algún día sacarán una con la firma del Abe.
ResponderEliminarYo si que malegro de habé conosio ar cabesa ese!!
ResponderEliminar:D
Al Chopin o al Abe? Porque si has conocido al Chopin te dejo de hablar xD
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