¿A qué elemento de la realidad debo atribuir la metáfora de "salsa brava"?
Eres adorable.
Bien SUJETOS. Hay que ver que bien cocinas...
Amigo Alberto, interpreta "salsa brava" como quieras. Una de esas interpretaciones será la mía, jaja.Susana, cariño, me alegras el día con tus palabras.Mar, si llego a hacer un revuelto de metáforas, te invito. Y pondré de segundo una ensalada de lexemas.
Jajajajajajajaja...
Qué risa tan misteriosa...
De Anónimo, que está en todas partes, escribe libros, suena en off, y encima también se ríe en las entradas de blogger. Jaja.
Anónimo en realidad es Dios ajajajaj. Curiosa receta, por cierto, aunque tendrías que haberle puesto un poco de oreja! jajajaja
¿A qué elemento de la realidad debo atribuir la metáfora de "salsa brava"?
ResponderEliminarEres adorable.
ResponderEliminarBien SUJETOS.
ResponderEliminarHay que ver que bien cocinas...
Amigo Alberto, interpreta "salsa brava" como quieras. Una de esas interpretaciones será la mía, jaja.
ResponderEliminarSusana, cariño, me alegras el día con tus palabras.
Mar, si llego a hacer un revuelto de metáforas, te invito. Y pondré de segundo una ensalada de lexemas.
Jajajajajajajaja...
ResponderEliminarQué risa tan misteriosa...
ResponderEliminarDe Anónimo, que está en todas partes, escribe libros, suena en off, y encima también se ríe en las entradas de blogger. Jaja.
ResponderEliminarAnónimo en realidad es Dios ajajajaj. Curiosa receta, por cierto, aunque tendrías que haberle puesto un poco de oreja! jajajaja
ResponderEliminar