lunes, 19 de marzo de 2012

EMMANUELLE

En la cama de los rojos secretos,
abiertas en un cielo peligroso,
yacían las calimas de mi cuerpo
tal Dios deshizo el Mundo: Sobre el torso


el mango de flor verde brilló lento
hundiéndose en la médula fecundo
y en un gemido hermoso
la lámina morada del deseo


1)     rajó la piel a tientas
        con filo poderoso, 
2)    vertió sobre las sábanas mi letra


       y en pétalos de luna hizo un dibujo,
       llamando a ese otro cuerpo que viniera
3)   a arder en lo profundo.








Alberto Cancio García


No hay comentarios:

Publicar un comentario